En Pinturas Arenas ofrecemos a nuestros clientes una extensa gama de masillas y plastes para todos los trabajos posibles, tanto a nivel doméstico como profesional, además de disponer de pinturas y materiales de decoración.
¿Qué son las masillas de pintor?
Se trata de compuestos de textura plástica que se emplean en los trabajos de construcción y reparación de las viviendas, tanto con el fin de arreglar grietas como para tapar las juntas.
Según su composición se pueden utilizar en las paredes o con diversos materiales, ya que una masilla destinada a la madera no tiene nada que ver con la clásica silicona que se pone entre la pared del baño y la ducha.
Tipos de masillas y sus usos
Dependiendo del uso hay que adquirir una u otra, teniendo en cuenta si es para una grieta, para sellar agujeros, si se va a poner en exteriores, en zonas húmedas, etc.
Masilla para paredes
La masilla para pared suele venir en botes grandes y se usa con el fin de reparar muros. Por ejemplo, cuando se pinta no es raro que la pared presente agujeros de colgar cuadros, grietas que salen con el paso del tiempo, desconchones, golpes, etc.
Con esta masilla se consiguen tapar e igualar, de forma que el trabajo de pintura queda perfecto.
Masilla para madera
Sirve a la hora de sellar uniones en las que la madera está presente, por ejemplo a la hora de tapar la junta que queda al instalar un rodapié de este material en el suelo, o si se coloca una encimera en la cocina.
Es fácil disimularla, pues una vez seca no hay problema para lijar, pintar y barnizar, igualándola con la madera que une y volviéndose invisible.
Masilla acrílica
Esta masilla acrílica es una multiusos, y que podemos emplear si no es necesario una demasiado específica, ya que sirve para una gran cantidad de materiales y se puede poner tanto en exteriores como en interiores.
Tapa grietas en las paredes y en las fachadas, y va muy bien a la hora de sellar las cajas de las persianas, por las cuales entra el frío en invierno, y lo mismo en los marcos de las ventanas.
Masilla de Poliuretano
Una de las preferidas en el mundo de la construcción por sus propiedades, pues no reacciona con los metales y pega en una gran cantidad de materiales.
Se usa tanto debido a que al secarse forma una especie de goma que se puede pintar y que soporta los esfuerzos, por lo que no se va a despegar cuando los materiales se dilaten y se contraigan por las temperaturas.
Además, va bien tanto en los interiores como en los exteriores, así que siempre conviene tenerla a mano dada su polivalencia.
Masilla antimoho
A la hora de tapar juntas en el baño y en la cocina, en especial en donde suele haber mucha agua, como en la zona de la ducha, la bañera o el fregadero, esta es la masilla que hay que comprar.
Viene con componentes antifúngicos, de manera que nunca se pondrá negra como sí suele ocurrir con las masillas de otro tipo, que si bien pueden tapar la junta sin problemas, con el tiempo se irán poniendo negras, en especial si el ambiente es muy húmedo.
Masilla ácida
Cuando las superficies no son porosas, la masilla ácida es una buena opción, convirtiéndose en caucho al contacto con el aire.
Resiste al moho y sella de forma hermética, así que es de las favoritas en los baños y en la carpintería metálica.
En nuestra web encontrarás todo lo necesario para el hogar, tanto si eres un particular como si tienes un negocio de reformas. Puedes contactar con nosotros si te surge alguna duda sobre las masillas y te recomendaremos las que mejor se adapten al trabajo que vas a hacer.